Antoni Rigo vuelve a escribir un interesante artículo uniendo la astrofilatelia y el Programa Apolo. Esperamos que lo disfruteis y agradecemos a Antoni, una vez más, su generosidad con este blog.
La misión Apolo 15 ha pasado a la historia *(ver nota abajo) por ser la primera en transportar a la Luna un vehículo lunar, una especie de todoterreno con el cual los astronautas pudieron desplazarse a mayores distancias que en la suma de todas las misiones anteriores.
Pero mucho menos conocido es el hecho de que, durante la fase de regreso, uno de los tres paracaídas del módulo Endeavour no se desplegó, y el impacto del módulo en las aguas pacíficas se produjo a mayor velocidad de la prevista. Aun así, este pequeño incidente no supuso en ningún momento ningún peligro para la integridad de los astronautas, ni tampoco para el rotundo éxito de la misión espacial.
La Astrofilatelia, siempre fiel a todos y a cada uno de los acontecimientos espaciales, también refleja esta peculiar circunstancia acaecida en el regreso de la misión.
En otras ocasiones la Astrofilatelia comete errores que los coleccionistas deben saber detectar puesto que el correcto conocimiento del material filatélico es uno de los conceptos puntuables en las exposiciones filatélicas competitivas.
Se presenta ahora un sobre con no uno ni dos sino tres errores. A saber, KSC no interviene en la fase de descenso de ninguna misión Apolo (1), la ilustración de los tres paracaídas desplegados (2) y el nombre incorrecto del módulo Endeavour (3).
La conmemoración astrofilatélica correcta de la misión Apolo 15 se debe realizar con la presentación de sobres cancelados a bordo del barco de recuperación principal, el USS Okinawa, encargado de recoger a la tripulación y al módulo.
08.08.71 USS Okinawa. Regreso al puerto de Hawaii del navío. Sobre inferior.
Pero a través de la Astrofilatelia podemos ir aún más allá, y recordar no tan sólo fechas y lugares sino también presentar piezas históricas de la misión, como podemos ver en el siguiente sobre, cancelado a bordo del USS Okinawa y adicionado con un trocito de uno de los paracaídas que voló a la Luna en la misión Apolo 15.
Con solo un sobre como éste, una historia poco conocida puede ser revelada, mediante fecha, lugar, un pedacito de la misión y una gran dosis de documentación y conocimiento de la apasionante investigación espacial.
Antoni RIGO.
Nov-Dic´14.
* Esta misión también ha pasado a la historia porque en el Apolo 15 se transportaron, sin la previa autorización de la NASA, 100 sobres filatélicos producidos por el comerciante alemán Hermann Sieger y 300 por la tripulación (100 para cada astronauta), y que, tras el regreso de los astronautas, los sobres del comerciante alemán fueron puestos a la venta al público. Tras conocerse la noticia la NASA apartó del programa espacial a la tripulación del Apolo 15.
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